Cada 30 de abril, en México se celebra el Día del Niño, una fecha muy especial dedicada a reconocer la alegría, la inocencia y el valor de nuestras infancias. Más allá de los regalos y las fiestas, este día nos recuerda la importancia de cuidar, escuchar y respetar a los niños y niñas, garantizando que crezcan en un entorno seguro y lleno de oportunidades.
En escuelas, comunidades y espacios públicos, se organizan actividades recreativas, culturales y educativas para que los pequeños disfruten su día como se merecen. Juegos, música, concursos y momentos de convivencia hacen del 30 de abril una jornada llena de sonrisas. Pero también es un buen momento para reflexionar como sociedad sobre cómo estamos cumpliendo con nuestros deberes hacia la infancia.
El Día del Niño no solo es una celebración, sino también un compromiso. Es recordar que cada niña y niño tiene derecho a ser amado, protegido y escuchado. Porque en sus manos está el futuro, y en las nuestras, la responsabilidad de guiarlos con respeto, cuidado y mucho corazón.
