Tlatlauqui se ha caracterizado por muchas cosas, su naturaleza, su historia, sus culturas, y digo culturas por que no es la misma cultura de Mazatepec que la de Oyameles, no se tienen las mismas tradiciones en Acamalota, que en la Colonia 85, pero algo que sin duda es único en todo el municipio es la producción de dulces típicos de elaboración artesanal.

Pues bien, hoy quiero platicarles sobre estos dulces manjares…

Cocadas, higos cristalizados, gaznates, macarrones, calabazas cristalizadas, pepitorias, manjar y jamoncillo, si señor!, puro sabor son estas delicias, que se elaboran en casas que fungen como taller de endulzamiento, el proceso debe ser cuidadoso ya que si no se pone el debido cuidado, o quedan insipidos, o bien, muy dulces.

Quien no ha disfrutado una tarde soleada caminando en el parque, con el trinar de las aves, las risas de los niños, el amor de los jóvenes, el consejo del mayor, el murmullo del agua de la fuente, el repique de la llamada a misa de 12, la suave caricia del aire que tranquiliza el alma, la majestuosa vista del cerro cabezón; díganme quien de Tlatlauqui o visitante no ha disfrutado esos momentos de relajación total?

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Conozco a no menos de 20 personas, que cuando los días están fríos en Tlatlauqui, se preparan un café y lo endulzan con algún higo cristalizado, a manera de quien remoja un pan en café.

Formas para degustar estos manjares artesanales y libres de químicos hay muchas, en la charla, como postres despues de una buena comilona de carnes ahumadas, en la sobre mesa, bueno, hasta en velorios los llegan a ofrecer, o simplemente, para darle gusto al paladar.

Ven a Tlatlauquear, aquí tu estancia la sabemos endulzar.

Tlatlauqi es de todos y para todos.!

German Lhudovick Moroni Landero

El Pariente.