El Presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó las mediciones internacionales en las que se asegura que la corrupción prevalece en México.

El Mandatario federal cuestionó las fuentes utilizadas para elaborar las estadísticas, ya que, de acuerdo con sus datos, sí existen avances en el combate a esas prácticas ilegales.

“Pues depende de la fuente, hay que ver qué opinión real tiene la gente, a ver cómo se mide, yo si le puedo garantizar que ya en México no hay la corrupción que imperaba hace poco, ya eso se terminó, hemos avanzado mucho y la gente lo percibe de esa forma, de acuerdo a nuestros datos, también para ser honestos”, dijo.

“Entonces, si se pregunta: ¿hay más corrupción ahora que antes? Pues no puede ser que el resultado sea que ahora hay más corrupción”.

López Obrador se refirió de manera particular a las mediciones que se realizaron sobre la corrupción que impera en el Congreso y consideró que tampoco se puede hablar de un incremento, ya que en legislaturas anteriores hasta se pagaron sobornos en legislaturas para garantizar la aprobación de reformas.

“Aún en el Legislativo, es distinto. Un escándalo como el de los sobornos a legisladores, cuando la reforma energética es un escándalo mundial, lo que pasa es que se tapó, los medios lo ocultaron, lo siguen tapando”, reprochó.

El pasado 15 de octubre REFORMA publicó que, en el mismo nivel de países africanos pobres o envueltos en violencia, México ocupa el lugar 135 de 139 entre las naciones más corruptas del mundo, según el ranking del World Justice Project (WJP).

A pesar de que el combate a la corrupción es un emblema de la gestión del Gobierno López Obrador, México pasó de ocupar el lugar 117 en 2019, al 135 en 2021, de 139 naciones analizadas.

Para realizar el Índice Global de Estado de Derecho, WJP analiza diferentes factores agrupados en ocho indicadores, entre ellos «Ausencia de Corrupción», en el que México salió peor evaluado.

A nivel global, apenas superó a Uganda, Camerún, Camboya y el Congo, mientras que en la región de América Latina y el Caribe, México fue el peor de 32 países que son analizados.

Para responder al informe, el Presidente recurrió a mediciones realizadas por el INEGI, pero no sobre corrupción, sino sobre la confianza que existe en las autoridades.

Sostuvo que, entre 2016 y 2020, la instancia que más incrementó el nivel de confianza fue el Gobierno federal, con un aumento del 136 por ciento.

Al mostrar los datos del INEGI, mostró que diputados y senadores también han avanzado en la percepción de la ciudadanía.

“Hay que tener cuidado con las mediciones, esto es INEGI, también se pueden equivocar, puede ser distinto, pero me llamó mucho la atención esa encuesta, pero se respeta”, indicó.