Todos sabemos que en Diciembre se festejan las tradicionales posadas, donde se debe hacer un recordatorio de los 9 días en que María y José salieron de Nazaret con rumbo a Belén, cada una de las 9 noches, incluída la del día 24, equivale a cada una de las veces que ellos, en su peregrinar, pidieron posada en el transcurso de ese viaje, así lo dicta la Religión Católica, y lo sustenta la Biblia.
Antes se realizaban rezos y cantos religiosos, no se pedía posada, ni mucho menos había piñatas.
Todo se fue desvirtuando con el paso del tiempo, la Religión continúa celebrando los 9 Rosarios Gozosos, generalmente después de la última Misa, algunas Parroquias hacen actividades como los cantos y piñatas, pero no más.
Esta tradición religiosa de realizar los 9 rezos fue creada por el Fraile Agustino Diego Soria, evangelizador que obtuvo el permiso del Papa Sixto V para llevar a cabo estas actividades como parte del proceso de evangelización.
Con el paso del tiempo, la celebración religiosa salió de las Personas, y fue a los barrios, en donde se desvirtuo, poco a poco se convirtió en una fiesta popular, los cánticos se tornaron cómicos, incluso vulgares, se introdujo la piñata, la música de moda y bebidas alcohólicas.
Se corrompió en su mayoría aquel festejo religiosos que se ejecutaba con motivo del peregrinar de María y José, así como el día máximo, el nacimiento del Niño Dios.
Aún así, la Religión y religiosos tratan de recuperar aquella antigua tradición de celebrar el nacimiento de Cristo, sin mofas, bailes de moda y alcohol, tratan de adaptar el respeto a la celebrado, al tiempo que llevan a cabo las tradiciones del barrio que no hacen daño.
