El presidente de México, Enrique Peña Nieto, presentó este lunes su sexto y último informe de gobierno en el Palacio Nacional, tras hacer entrega del respectivo informe al Congreso de la Unión el pasado sábado 1 de septiembre.
«Los hechos respaldados por cifras verificables deben ser el criterio principal para evaluar una administración», señaló Peña, quien destacó algunos logros de su gestión al mismo tiempo que reconoció la «persistencia de rezagos y desafíos a pesar de los esfuerzos realizados».
El presidente aseguró que al término de su administración, cumplirá con el 97% de los compromisos adquiridos durante su campaña. «Este gobierno no se propuso sólo administrar. Nos hemos dedicado a transformar a México», dijo.
«He de reconocer que no en todas las asignaturas alcanzamos los objetivos propuestos. Sin embargo, puedo asegurar que siempre actuamos para remover los obstáculos que habían impedido el desarrollo pleno», agregó el mandatario mexicano en su último informe de labores.
«Hoy somos un país mejor que el que éramos hace seis años», afirmó.
Las reformas estructurales, lo más «trascendente»
Peña Nieto destacó los logros del Pacto por México, a través del cual se impulsaron las reformas estructurales que marcaron su sexenio. «Buscamos convencer, nunca imponer», dijo.
«Las reformas estructurales aprobadas en los primeros años de la administración han sido el eje a lo largo del sexenio», apuntó el presidente. «Son el logro más trascendental de esta administración», agregó.
Ante los presidentes de la Cámara de Diputados y el Senado, entre otros invitados, el mandatario mexicano destacó que «sólo en un país con instituciones sólidas puede haber paz para todos».
Seguridad, el gran pendiente
Peña también destacó la implementación del Sistema Penal Acusatorio y aseguró que «enfrentamos a todos los grupos criminales».
«Asegurar el respeto de la ley sigue siendo uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo», añadió Peña. «El gobierno tuvo éxito en reducir la capacidad de esas organizaciones», dijo el presidente sobre la estrategia contra los cárteles de la droga.
Sin embargo, reconoció que debilitar a los grandes cárteles provocó la fragmentación de las organizaciones criminales y el surgimiento de pequeños grupos que mantienen altos niveles de violencia.
«Ese mismo debilitamiento provocó el surgimiento de bandas criminales de menor tamaño sin que existieran en el ámbito local las capacidades policiales necesarias para enfrentarlas con eficacia», dijo.
«Estoy consciente de que no alcanzamos el objetivo de recuperar la paz y la seguridad para todos los mexicanos en todos los rincones del país», aseguró Peña.
El mandatario externó su reconocimiento con un minuto de aplausos a las fuerzas armadas que realizan labores de seguridad.
Pobreza en «mínimos históricos»
En términos de combate a la pobreza, Peña destacó que los programas sociales como Prospera y la Cruzada contra el Hambre, beneficiaron «más a quienes más lo necesitaban».
«Los resultados de la política social nos alientan. Más de 2 millones de mexicanos salieron de la pobreza extrema», apuntó el mandatario, quien señaló que los porcentajes de población en pobreza se encuentra en «mínimos históricos», por lo que el país podrá salir de la pobreza extrema en la siguiente década.
Defiende la reforma educativa
En 2012, según Peña, México tenía un sistema educativo «discrecional e injusto». En este sentido, afirmó que «el clientelismo había sustituido al mérito».
En este sentido, hizo hincapié en la recuperación de la rectoría del Estado en la educación, con lo cual, sostuvo, se impidió que la educación fuera rehén de «intereses particulares e ilegítimos».
Peña también destacó lo que consideró como la mayor inversión en infraestructura escolar de la historia de México, «mayor que los dos sexenios anteriores, juntos».
Economía estable
En el ámbito económico, Peña resaltó que su principal objetivo fue mantener la estabilidad del sistema económico.
«Privilegiamos por encima de cualquier otra prioridad económica, la estabilidad», dijo, lo cual implicó impulsar reformas poco populares como la reforma fiscal.
«Las reformas han abierto nuevas oportunidades en sectores como el energético y telecomunicaciones, lo que ha generado mayor competencia y menores costos para los consumidores», afirmó Peña.
También destacó la creación de empleos a lo largo de su gestión. «Este es el sexenio del empleo», añadió Peña.
Hemos defendido al país con «dignidad»
En materia internacional, Peña dijo que su administración defendió «con dignidad» los intereses nacionales frente a amenazas externas, en una clara alusión a los continuos choques que ha tenido el gobierno mexicano con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
«Hemos defendido los intereses de México y los mexicanos con firmeza, pero sin caer en provocaciones. Hemos actuado con prudencia y respeto pero siempre con decisión y dignidad en defensa de los intereses nacionales», expuso.
Agregó que una democracia sólida y los tratados comerciales fortalecen los vínculos de México con otros países.
También destacó el interés de México por incluir a Canadá dentro de una renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
La despedida
Peña aprovechó la recta final de su mensaje para agradecer y despedirse de quienes lo acompañaron a lo largo de su administración, comenzando por su esposa y sus hijas.
«De manera especial, sentida y sincera, mi más profundo agradecimiento a México, a toda su gente, que en mi diario quehacer me inyectó ánimo y energía para mantener la entereza y el carácter necesario en la administración de la República», expresó.
«Ha sido el más alto honor de mi vida servir a México como presidente de la República», señaló el mandatario con la voz entrecortada.
No obstante, a lo largo de casi dos horas de mensaje, el presidente no habló de la corrupción y los casos de violaciones graves de derechos humanos que marcaron su administración.
