La detención de Jaciel Antonio “N”, alias El Pelón, marca un avance decisivo en el caso del asesinato del alcalde Carlos Manzo. Capturado en Uruapan durante un operativo federal, es señalado por las autoridades como el hombre que reclutó a los jóvenes utilizados como sicarios, muchos de ellos captados en centros de rehabilitación donde aprovechaba la vulnerabilidad de los internos para integrarlos al crimen organizado. Entre los reclutados se encuentran Víctor Manuel “N” y Fernando Josué “N”, implicados directamente en el homicidio.
Aunque por ahora enfrenta cargos por cohecho y delitos contra la salud, las autoridades consideran que su participación fue más profunda y lo vinculan con una estructura criminal relacionada con el Cártel Jalisco Nueva Generación. Su captura abre la posibilidad de desmantelar la red que operaba mediante la captación de personas vulnerables, un método que se ha vuelto común en organizaciones delictivas. Para los investigadores, este arresto podría ser la pieza clave para cerrar el caso y avanzar hacia más detenciones dentro del grupo responsable.




