“De una vez por todas”, es como el Gobierno del Estado ha decidido nombrar al programa que supone acabará con la violencia de género en nuestro estado, esto como consecuencia al aumento de la lista de feminicidios que todos ya conocemos (por lo menos de manera oficial).

Con campañas de prevención de la violencia, nuevos centros de Ministerios Públicos para atención y orientación a víctimas, mayor presupuesto para las instancias de impartición de justicia y la iniciativa de una Ley de Acoso y Hostigamiento Sexual, son algunas de las acciones con las que el Gobierno Estatal pretende atacar la problemática que aqueja y apunta a las mujeres como el blanco perfecto para seguir considerado un Estado aún más
inseguro que alguno del norte del país.

“De una vez por todas”, pretende cuidar la integridad y seguridad de las mujeres poblanas, mismo que, desafortunadamente no pudo proteger a las ochenta y tantas mujeres que han sido asesinadas y a las últimas dos que durante este fin de semana fueron víctimas una vez más de quienes nos ven como enemigas.

Claro está que, quienes cometen estos crímenes no temen a las “poderosas acciones” que el gobierno pretende implementar, porque ‘entre que son peras o manzanas’ y deciden cuál será la mejor alternativa para cuidarnos, los atracos siguen y seguirán sucediendo, el miedo y la incertidumbre de salir a las calles crece cada día, la frustración, el coraje y la impotencia nos hacen gritar a los cuatro vientos, al otro lado del mundo y al universo entero que, estamos cansadas y vivimos con miedo gracias a que muchos nos ven como objetos desechables, como el sexo débil, como máquinas sexuales, como simples pedazos de carne, como una amenaza, como un plato que hay que devorar cuanto antes, así que, ¿de qué manera hay que decirlo? Ni una más, basta de violencia, nos queremos vivas y la lista de frases podría continuar, por lo que solo me resta decir que, ¡de una vez por todas, necesitamos acabar con la violencia de género!