Gobierno del Estado denunciará al IMSS por negligencia médica.

Un calvario es lo que vivió una familia tlatlauquense, padres del bebé prematuro a quien médicos del hospital del IMSS de La Margarita dieran por muerto, pero que más tarde empleados de una funeraria lo encontraron vivo, hechos suscitados el pasado 21 de octubre.

Elisa Cordova presentaba 23 semanas de gestación cuando acudió a una clínica familiar en Amozoc, lugar donde actualmente reside, al realizarse el chequeo la mujer de 31 años de edad presentaba presión arterial alta, por lo que fue trasladada de emergencia al Hospital General no.20, la Margarita.

Después de permanecer 4 días en este hospital, médicos iniciaron el proceso para provocar la dilatación y así, adelantar el que sería su primer parto natural. La madrugada del 21 de octubre nació su bebé, con tan sólo seis meses de gestación sus probabilidades de sobrevivir eran pocas; sin embargo, previo a que la anestesia general surtiera efecto, alcanzó a escuchar decir a dos enfermeras que el niño había nacido bien y con vida

Su padre de nombre Santiago Albino de 34 años, y quién es originario del municipio de Tlatlauquitepec, recibió la misma noticia, pero dos horas después, una segunda trabajadora social le entregó una carta de defunción y la noticia lamentable: su primogénito había nacido sin vida.

A las 4 de la mañana Santiago contrató los servicios de la funeraria «Flores» para recoger y preparar el cuerpo, sin contar con que la trabajadora social en turno negaría el acceso al personal por seis horas, tiempo que el cuerpo del menor estaba dentro de una cámara de refrigeración. Fue hasta las 10 de la mañana que el personal obtuvo el pase. Santiago los acompañó en todo momento y pidió ver a su hijo antes de que se lo llevaran. acceden, con cuidado destapan el cuerpo y el milagro se cumplió: el menor aún respiraba.

Conmocionado y con el amor de padre a flor de piel, Santiago le habló a su hijo y notó sus reacciones: movió sus manos, sus pies y después un llanto que sería el grito de la vida. De forma inmediata, el bebé recibió la atención médica necesaria para mantenerlo con vida, y actualmente se encuentra en una incubadora bajo monitoreo constante.