El pasado 25 de marzo, un menor de edad se vio obligado a correr a pedir auxilio tras descubrir el cuerpo sin vida de Estefanía N. en un inmueble ubicado en la calle 21 de Marzo, en la colonia La Ribera, Xicotepec de Juárez. Según las investigaciones, la joven fue asesinada de múltiples puñaladas, habiéndose especulado que recibió más de 30 heridas, evidenciando la extrema violencia del crimen.
La Fiscalía General del Estado (FGE) ha abierto una investigación ministerial que se desarrolla con perspectiva de género, a fin de esclarecer los detalles de este atroz feminicidio. Las primeras indagaciones revelaron que, días antes de su trágica muerte, Estefanía había denunciado en redes sociales situaciones de acoso y hostigamiento. En un mensaje que generó gran preocupación, la víctima relató:
“Hay una persona que el día sábado me estuvo hostigando y me tomó fotos sin mi consentimiento. La verdad, en ningún momento le presté atención y en varias ocasiones le pedí que dejara de tomarme fotos, a lo que me decía que ‘solo una y ya’. Incluso hasta una amiga le comentó que ya era incómodo, pero la persona siguió. El día de ayer me comentaron que la persona me subió a su estado sin mi consentimiento y comentando cosas que me incomodan. Qué pena, ojalá los hombres entiendan un día lo que es el respeto.”
La brutalidad del crimen ha generado una respuesta inmediata en la zona. Vecinos y amigos de Estefanía han exigido a las autoridades de Xicotepec de Juárez un reforzamiento en las medidas de seguridad para evitar que hechos similares se repitan. Ante la ausencia de familiares —debido al fallecimiento de su madre durante la pandemia de Covid-19—, se ha organizado una colecta económica para sufragar los gastos funerarios de la joven.
Asimismo, colectivos feministas de la Sierra Norte y de la capital poblana han anunciado que convocarán manifestaciones, exigiendo una investigación rápida y exhaustiva que permita llevar ante la justicia a los responsables de este delito. Mientras tanto, el menor que encontró el cuerpo ha recibido atención psicológica, en un intento por suavizar el impacto emocional ocasionado por el hallazgo.
El caso de Estefanía N. se suma a la creciente preocupación por la violencia de género, destacando la necesidad imperiosa de fortalecer las acciones preventivas y de protección hacia las mujeres en la región. Las autoridades continúan trabajando para desentrañar los hechos y proporcionar respuestas a una comunidad que clama por justicia.



