En el primer año de gobierno de Claudia Sheinbaum, las autoridades federales lograron desmantelar mil 150 narcolaboratorios en distintas regiones del país, de los cuales dos operaban en el estado de Puebla. El reporte oficial detalla que estos espacios clandestinos eran utilizados para la producción de drogas sintéticas, lo que representa un golpe directo a las estructuras criminales que operan en la zona.
De acuerdo con la información difundida, los operativos forman parte de una estrategia nacional para debilitar las cadenas de producción y distribución de narcóticos, priorizando las regiones donde este tipo de actividades tiene mayor presencia. Aunque la cifra muestra un avance considerable, especialistas advierten que el reto en materia de seguridad sigue siendo complejo, pues los grupos delictivos cuentan con amplios recursos para reubicarse y reorganizarse.
En Puebla, los dos laboratorios detectados fueron clausurados de manera definitiva y se mantiene vigilancia en áreas consideradas de riesgo. Las autoridades señalaron que estos esfuerzos buscan no solo frenar la producción, sino también disminuir la violencia asociada al narcotráfico, que en los últimos años ha impactado a distintas comunidades del estado.
