Cada 10 de mayo se celebra a las madres en México, pero millones enfrentan realidades marcadas por precariedad, violencia y doble jornada.
En México hay más de 35 millones de madres, muchas de ellas jefas de familia y trabajadoras. Según el INEGI, el 71% forma parte de la población económicamente activa, pero la mayoría debe combinar empleo con labores domésticas sin remuneración ni apoyo institucional.
Una de cada cuatro madres cría sola a sus hijos, muchas veces en condiciones de informalidad laboral. A pesar de leyes que las protegen, miles son despedidas o discriminadas por estar embarazadas. Además, muchas enfrentan violencia doméstica y falta de acceso a servicios básicos.
Más allá de los festejos, organizaciones sociales insisten en la necesidad de políticas públicas que garanticen empleo digno, estancias infantiles, salud y entornos libres de violencia para todas las madres mexicanas.