Puebla, Pue. Don Agustín Grenada y su esposa llevan 35 años de oficio como organilleros, compartiendo melodías como la reilera, cielito lindo, la Adelita, transmitiendo alegría en las calles del Centro Histórico de la Ciudad de Puebla.

El origen de este instrumento se da en Alemania durante el siglo XVII, tiempo después se produjeron más y fueron enviados a los demás países para su venta.

Estos organilleros constan de un cilindro y un manubrio que es movido, de esta manera se produce el sonido.
Relata Don Agustín que en Alemania utilizaban a simios para que recogieran las monedas dadas por la gente, por lo cual también se adoptó en México pero con monitos de peluche, dándole un toque encantador al instrumento.

La familia de Don Agustín se dedica a este bonito oficio que va de generación en generación, a pesar de la innovación en la música ellos se sienten orgullosos de seguir conservando esta tradición musical.

Foto: Denise Luna