Tlatlauquitepec, Pue.— La planta procesadora de frutas Del Monte (Industrias Citrícolas de Montemorelos S.A. de C.V.), ubicada en la comunidad de Pezmatlán, podría suspender operaciones en las próximas semanas tras la declaración de bancarrota de su casa matriz en Estados Unidos, lo que ha generado incertidumbre entre sus trabajadores y en toda la región.

Aunque la empresa no ha confirmado oficialmente su salida de la zona, empleados y autoridades advierten que el cierre es una posibilidad real. En riesgo están al menos 600 empleos directos, además de cientos de actividades económicas que dependen indirectamente de esta planta, activa desde 1974 y dedicada a la producción de conservas de toronja y mango para exportación.

El gobernador Alejandro Armenta reconoció este lunes que la situación es delicada, y anunció que su administración ya diseña una estrategia para responder en caso de que se concrete el cierre. Durante su conferencia matutina, el mandatario aseguró que los trabajadores no serán abandonados. “Vamos a atender a quienes eventualmente pierdan su empleo. Todos ellos son necesarios para fortalecer el campo poblano”, expresó.

Entre las acciones planteadas, el gobierno estatal contempla incorporar a los afectados en proyectos de cultivo y transformación de productos regionales, dentro del plan de siembra de 200 mil hectáreas y a través de los Centros Integrales de Innovación y Transformación Agroindustrial (CIITRAS), con los que se busca detonar una nueva etapa de autosuficiencia alimentaria en el estado.

En paralelo, Armenta propuso reducir la dependencia de grandes corporativos transnacionales, y en su lugar impulsar marcas poblanas como Café 5 de Mayo, que priorizan el desarrollo económico local con rostro social.

Mientras tanto, en Pezmatlán, la incertidumbre crece. Algunos empleados continúan laborando de manera habitual, aunque con menor actividad en algunas áreas. Las líneas de atención al público permanecen activas y aún se promocionan vacantes en línea, pero reina el silencio por parte de la dirección general. Ni los trabajadores ni las autoridades locales han recibido información oficial sobre el futuro de la planta.

El posible cierre de Del Monte en Puebla sería un golpe histórico para la región. Durante más de cinco décadas, la planta no solo generó empleo, sino que sostuvo parte del desarrollo comercial, agrícola y familiar en la Sierra Poblana