[sg_popup id=»7297″ event=»inherit»][/sg_popup]La muerte en el limbo paseaba, un lugar para tomar almas buscaba, su mano en México estaba y San Lázaro su índice señalaba.
A la Cámara de Diputados se trasladaba, pero una duda en su mente giraba, ¿será que allí encuentre almas?, sabía que los Diputados casi nunca estaban.
Por los pasillos caminó y caminó, los cubículos solos vio, entonces al salón del pleno se encaminó, más ruido alguno no escuchó.
Al pasar por el cubículo de David, apuntando cosas en su agenda lo observó, en la puerta se colocó y con los falanges la puerta tocó.
David olor a azufre percibió, la mirada levantó y un brinco de su silla pegó, agenda y pluma al suelo tiró y con voz entrecortada a pasar a la muerte invitó.
¿No se habrá equivocado de corredor?, Dijo David con temor, aquí no están los del PRI ni los del PAN, a esos sí lleve al más allá, a los de MORENA déjenos acá, mayoría somos ya.
Sólo te pasé a saludar, tu comportamiento vengo a supervisar, quiero saber si a los privilegios parlamentarios vas a renunciar, que curul ocupas ya y si a tus paisanos vas a apoyar.
Si Señora, mire Usted, mi curul es 42 letra B, casi no la ocupo yo, solamente en la sesión, siempre atiendo desde aquí, más no puedo pedir, cualquier lugar es bueno para servir.
Eso bien me parece, dijo la malora rechinando los dientes, un favor quiero pedirte, no te olvides de la gente, el Diputado al pueblo se debe.
Sólo por si acaso te diré, yo por aquí pasé, con suerte te encontré, tu trabajo debes hacer o tu alma al más allá enviaré, y una curul no te daré.
Un consejo más te diré, no te acerques mucho a la curul, esas tienen maldición, Morfeo las sentenció y las arpías del sueño son.
Legislar es tu deber, el tiempo no has de perder, eso es para el PRD, en tribuna debes exponer, muy coherente tienes que ser o Noroña te apodaré.
No hagas caso a los del PAN, esos calientes aún están, la mala opinión no se pueden quitar, por las reformas de Peña apoyar.
El pueblo en MORENA confío, también lo hago yo, no se corrompan por favor, si lo hacen ni al panteón los dejaré entrar yo.
Trataré de no fallar, la guadaña no quiero probar, cuando vea que fallo yo, un jalón de orejas deme por favor, pero nada de panteón.
Te dejo trabajar, el ojo te voy a echar, no la vayas a regar o tu alma al limbo irá a dar y allá con los priístas en la eternidad tendrás que vagar y ni AMLO te salvará.