Con el Domingo de Ramo,  la Iglesia Católica da inicio a la Semana Santa o Semana Mayor, con la tradicional procesión en donde se recuerda la entrada triunfal de Jesus a Jerusalén. 

La Semana Santa es el momento litúrgico más intenso de todo el año. Sin embargo, para muchos católicos se ha convertido solo en una ocasión de descanso y diversión.

La Semana Mayor, habrá de concluir hasta el Domingo de Pascua, que en este año es el 31 de marzo.

La Semana Santa fue la última semana de Cristo en la tierra. Su Resurrección recuerda que los hombres fueron creados para vivir eternamente junto a Dios.

Durante este tiempo, se desarrollarán celebraciones importantes para la Iglesia. Como la misa Crismal, que preside el Obispo y se concelebra con los sacerdotes de la diócesis para la bendición de los aceites que se usarán para los enfermos y los que van a ser bautizados. Además, los sacerdotes renuevan sus promesas sacerdotales, las promesas que hicieron ante Dios y ante la Iglesia de ser fieles al ministerio recibido.

También está el triduo pascual que inicia el Jueves Santo. Este día se recuerda la Última Cena de Jesús con sus apóstoles en la que les lavó los pies. Además, fue cuando instituyó la Eucaristía y el Sacerdocio.

El Viernes Santo se recuerda la Pasión de Jesús. La cual se conmemora con el Viacrucis.

El Sábado Santo o Sábado de Gloria, se recuerda el día que pasó entre la muerte y la Resurrección de Jesús. Es un día de luto y tristeza. En los templos, las imágenes se cubren y los sagrarios están abiertos. Por la noche se lleva a cabo una Vigilia Pascual para celebrar la Resurrección de Jesús.

Y el Domingo de Resurrección, o Domingo de Pascua, es el día más alegre para los católicos, ya que Jesús venció a la muerte y dio la vida. Y es en este día que culmina la Semana Santa.