Dentro de la mágica sierra nororiente de Puebla, enclavado entre montes y ríos, se encuentra el maravilloso pueblo de Hueyapan, tierra rica en fauna y flora, tierra de tradiciones prehispánicas, de cultura ancestral regida por usos y costumbres.

En Hueyapan conviven armoniosamente la religión y las creencias antiguas, aquí aun vive la lengua madre, se respira la esencia del totonaca y se escucha el nahuatl, se usa con orgullo el huareche, la manta y la blusa de labor, se percibe el olor a leña, su gente esta considerada como la mas noble y cálida de toda la serranía.

Aquí se festeja a San Andrés y Santa Filomena, al tiempo que se sigue buscando la guía de Tlaloc para conocer las temporadas de lluvia para la siembra, en esta cultura aun se pide el consejo de los mayores, se respeta su palabra y se obedecen sus decisiones, los mayores son los guías del futuro de Hueyapan.

Acá es común apreciar los coloridos bordados, los cuales nos representan en México y el Mundo, este lugar es la cuna de estos majestuosos trabajos artesanales, hombres, mujeres y niños son responsables de dejar absortos a los visitantes, pues aún cuando es un pueblo con creencias muy arraigadas, se valora la importancia de la Mujer en su sociedad.

La historia nos cuenta que aquí llegaron procedentes del ahora Cuetzalan varios grupos totonacas, mismo que se fueron estableciendo en pequeñas comunidades, mismas que hoy conforman este maravilloso municipio.

Con la llegada de los españoles fueron sometidos al régimen de encomenderos, mayoritariamente en las casas de familias españolas que se dedicaban a servir a la corona como misioneros y evangelizadores en la nueva España.

Hueyapan es un rinconcito mas de la majestuosa sierra mágica poblana, visitarlo en remontarse a los tiempos del trueque, vivir sus festejos es comprobar la fe de su gente, conocer su trabajo es constatar la dedicación que tienen sus artesanos puntada tras puntada, conocer Hueyapan es conocer el México antiguo, el que nos llena de orgullo.