De todos es bien sabido que el PRI obtuvo una de las peores palizas electorales en su historia, no queda lugar a dudas que en Puebla fue la peor, se quedó con pocos diputados, alcaldías y regidurías proporcionales, no le fue nada bien, pero los priístas ocupan la estrategia que dicta «estar poco es mejor a no estar» y a esa estrategia le denominan en palabras de Iván Galindo Castillejos como la buena oposición.

Hace unos días el Regidor priísta saliente por el Ayuntamiento de Puebla sostuvo una reunión con líderes de su partido en Teziutlán, más allá de una visita social, fue el reencuentro de militantes que lideraron planillas, organizaciones filiales y grupos priístas en el pasado proceso electoral y a los que nadie tuvo el mínimo gesto de agradecer la votación obtenida, misma que ayudó a algunos para ser legisladores federales por la vía plurinominal, hasta hoy solo Iván les agradece ese trabajo.

En ese concilio casual Iván Galindo se convirtió en invitado y anfitrión, pues en torno a él se reunieron para señalarle los errores que cometió la dirigencia de Estefan Chidiac, la cual nunca tuvo la humildad de recibirlos y dejó muchas decisiones en manos de Gerardo Mejía, acciones que los militantes percibieron como traiciones, bien refirió uno de los asistentes, primero le tuve que ganar al mismo PRI para posteriormente ganar la elección.

En medio de anécdotas electorales, señalamientos y quejas contra la entonces dirigencia, solicitó la palabra uno de los representantes de Corriente Crítica, organización que realiza como lo dice su nombre, críticas, pero no sólo a la oposición, lo hacen también hacia su propio partido, en la participación del representante le cuestionó a Galindo si busca la dirigencia del partido en Puebla y que en caso de ser así, cuente con el apoyo de la organización en la zona norte y nororiente.

Después de escuchar todas las opiniones, tocó el turno a Iván, agradeció la asistencia a la charla y permanencia de los presentes en el PRI, refiriendo que le llena de orgullo saber que muy a pesar del resultado, se mantienen firmes demostrando ser verdaderos militantes y no oportunistas, esos ya se fueron a otros partidos, ahora en el PRI sólo quedamos los verdaderos priístas que conocemos realmente los estatutos y nos sentimos orgullosos de los logros que tuvo el partido en los viejos tiempos y trabajaremos para que esos logros que no son personales sino sociales, vuelvan a la gente por medio de nosotros, refirió.

Tanto él como los presentes manifestaron abiertamente su hartazgo a las imposiciones, mismas que no le permitieron al PRI recuperar el Estado, así mismo se mostraron interesados en que se tome nuevamente a la base en cuenta en torno a todo lo referente al partido, tanto para el cambio del CDE y los municipios, así como para todo lo subsecuente y que involucre tomar decisiones que puedan afectar al instituto político.

De igual forma se manifestaron listos para la renovación de la dirigencia, dejando claro que apoyan su aspiración a ser él quien retome el timón y no permita que su partido siga al garete y por último pactaron no permitir que un grupo, cualquiera que sea, se adueñe del partido, buscarán siempre incluir o ser incluidos, pues ya no están dispuestos a sólo obedecer porque así lo mande alguien, buscan ser escuchados, tomados en cuenta y si es posible dirigir con todos los priístas y ven bien a Iván Galindo Castillejos para que sea él quien recupere posiciones para el PRI en las elecciones del 2021 desde el CDE y por supuesto, como principal dirigente.