María Consuelo N. acusada de retener y matar a varios animales en una vivienda en Bosques de San Sebastián en 2019, fue vinculada a proceso y permanecerá en prisión hasta el 19 junio de 2024 que termine la investigación complementaria por crueldad animal.
Así lo informó Esther Martínez de Abogados Animalistas de Puebla, quien explicó que en la audiencia inicial llevada a cabo este miércoles en la Casa de Justicia de Puebla, un juez decidió dictarle prisión preventiva necesaria.
Sin embargo, apuntó que la mujer podrá recurrir a pedir una salida alterna, de no hacerlo tendrá que esperar hasta la apertura de juicio, la cual se podría llevar a cabo en ocho meses.
“Afortunadamente porque el delito está bien acreditado, así como su presunta responsabilidad, fueron suficientes las pruebas”, comentó.
La carpeta de investigación se alimentó por el hacinamiento de los animales hallados en su casa, su falta de cuidado y el maltrato.
Estimó que, de ser encontrada culpable de crueldad animal, podría alcanzar con las hasta 200 años de prisión con la suma de las pruebas recabadas.
Descartan que hayan sido utilizados para carne enchilada
Los integrantes de Abogados Animalistas compartieron que, por las características de los perros encontrados en esa ocasión, no pudieron ser utilizados para carne enchilada, ya que eran especies que estaban “flaquitas” y se notaba que eran cruzas entre ellos.
Indicaron que sólo tres fueron devueltos a sus familiares, el resto siguen en Protección animal municipal y algunos más fallecieron.
“Algunos los tuvieron que dormir por las condiciones en las que estaban, por falta de una buena alimentación tenían daños en hígados y riñones”, comentó.
La mujer fue detenida el pasado viernes por elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE) en la colonia Coatepec, al sur de la capital poblana.
Los activistas relataron que su aprehensión se llevó a cabo en un mercado y no en su vivienda.
María Consuelo también fue acusada de vender y comer carne de los animales que retenía en un departamento de Bosques de San Sebastián, después de que vecinos descubrieran cómo tenía a varios perros y gatos reportados como extraviados, de los cuales se dijo pedía recompensas.
De acuerdo con testigos, en el departo tenía 50 animales vivos y cadáveres de otros en refrigeración.
Sin embargo, al llegar la policía municipal ese día no la detuvo por el maltrato hacia los perros y gatos en el lugar, sino para resguardarla de la gente que la rodeaba que querían lincharla, por lo que en esa ocasión fue detenida por las condiciones en las que se encontraba uno de sus hijos con discapacidad.
