Todos conocemos la historia del perro de las dos tortas, adaptación mexicana de la fábula de Esopo «El perro y el pedazo de carne», esta vieja y sabia fábula narra lo siguiente:

Un perro llevaba en el hocico un trozo de carne, cuando se disponía a pasar un río, el perro vio reflejada la sombra del trozo de carne que llevaba, viendo que el pedazo de carne que se veía en el agua era más grande y jugosa que el que llevaba consigo.

El perro se quedó quieto un rato mirando fijamente la imagen, hasta que abrió el hocico para agarrarlo; al hacer esto, el trozo de carne que llevaba se le cayó al agua, quedándose el pobre sin ambos trozos.

Hay veces que por mas experiencia que digamos tener, que por mas astucia que presumamos y habilidades de las que nos jactemos, cometemos el error de no analizar lo suficiente algunas situaciones y nos adelantamos a los tiempos, sin saber siquiera si estaremos vivos o en condiciones para afrontar ese futuro; así le paso al Diputado Federal Armenta Mier. Quien decidió enfrentar al PRI, acusar públicamente a uno de sus lideres y mostrarse muy atento y servil con López Obrador.

Como todo ciudadano, tiene derechos, el los ejerce y así se manifiesta totalmente de acuerdo a pertenecer a MORENA, refiere que su ideología es igual a la de ellos y que comparte el dolor de México y Puebla, se empezó a mostrar gradualmente en mitines de MORENA y hasta las manos levantó con López Obrador; en donde se sumó a otro de los tantos pactos (por no decir meros discursos) de Obrador. Los poblanos reciben esta información como la búsqueda de la candidatura de MORENA al gobierno del estado por parte de Armenta.

En el PRI iba bien, fue el único priísta que recorrió el estado después de la derrota de Blanca Alcalá, convivió y agradeció el apoyo; reitero, fue el único que lo hizo. Eso le ganó gran aceptación en el entonces su partido, al cual siempre defendió, refiriendo que le debía todo al PRI y a sus militantes. Pero ahora se va con MORENA, citó a la gente y organizaciones que cree lo apoyan el pasado sábado para hacer pública su integración absoluta a MORENA, pero la suspendió al recibir la información de que los franquiciatarios de MORENA no estaban de acuerdo con sus formas y mucho menos con el acarreo de gente al paseo Bravo para mostrar su músculo y posiblemente así arrebatar la candidatura o congraciarse con Obrador y recibir su venia en Puebla.

Aún así se fue a mostrar en el cierre de campaña de la candidata al Estado de México, el pasado domingo, en donde ademas se tomó la foto con José Juan Espinoza y Miguel Barbosa, los cuales, son desde un poco antes que él, los que también pretenden ser ungidos por Obrador y así representar a los morenistas para dirigir los rumbos de Puebla.

¿Por qué la fábula?

Bueno, como ya se mencionó, iba bien en el PRI, casi la tenia en la bolsa, se dejó «apantallar» por algunos priístas, algo que no debía dejar que pasara, él ya es viejo lobo en la política y se mostró muy inocente al adelantarse a los tiempos y al dejar de recorrer y visitar a los integrantes de su partido en el estado, perdió el apoyo de muchos y de pronto se vio algo débil, entre estas y otras razones que él deberá tener, decide abandonar al PRI y se esmeró por dejar la puerta bien cerrada, confiando en que MORENA lo recibiría con los abrazos bien abiertos y la mesa servida, pero no fue así, la dirigencia estatal no aceptó sus usos y costumbres, como quien dice, el que la hace no la consiente y de momento pareciera ser que no habrá candidatura a gobernador para Armenta Mier.

P.d. No todo lo que brilla es oro, dejo esta encomienda de Don Vito Corleone a unos de sus más leales pistoleros.

«Ven con los Tattaglia y diles que no estás contento con la familia Corleone, gana su confianza, investiga y me informas»

Así las cosas…