Todo pueblo cuenta con personajes singulares que vemos a diario y son parte ya de la vida cotidiana de los pueblos o colonias. Algunos se la pasan refunfuñando, otros son misteriosos y otros más son alegres, varios realizan trabajos a destajo, tal es el caso de Paulina Córdova Silverio, mejor conocida como «la colega».

En Tlatlauquitepec centro se le ve ya desde hace más de 12 años, es originaria de la comunidad de Tepeteno, lugar en el cual vivió casi hasta después de la construcción de la pista, en la cual se ganó su primer alias con los trabajadores e ingenieros de la obra, al igual que hoy, en aquella ocasión vendía dulces, refrescos y galletas a los ya mencionados, los cuales la conocían como «la chica apasco».

Militante de hueso colorado del revolucionario institucional desde siempre, defiende a su partido ante todo, en el período de gobierno del Mtro. Macario Vázquez fue comisionada para dar cuidado y cobrar por el servicio de sanitarios en el salón México, en el cual dejaba pasar gratis a los colegas, pero a los no colegas les hacía el cobro respectivo.

Posterior a ese trabajo rentó un espacio y trató de incursionar en el negocio de la miscelánea, desafortunadamente no tuvo éxito en aquella apuesta, pues ella no se sentía a gusto estando en un sólo lugar todo el día, prefirió ir con un compadrito para trabajar con él y fue así como nuevamente comenzó a caminar vendiendo plantas de ornato hasta que cambió nuevamente por la venta de refrescos, dulces y galletas hasta el día de hoy.

Es difícil no encontrarla en algún momento del día y al grito de «saca las cocas, te toca» es como desde hace varios años le dice al de la voz y a muchos más al momento de percibir ella nuestra presencia. A su forma de entender la vida y su gusto que es la política, ella anda feliz por las calles visitando negocios y saludando transeúntes para ofrecer lo que vende a su particular estilo, «que hay colega, que me compras».

Sin duda Paulina o la colega es un personaje de la cabecera de Tlatlauquitepec, es ya un personaje del barrio. Cuando la encuentre por favor comprele algo, ella así se gana la vida.