Dicen los expertos que el grado de perversidad en las elecciones mexicanas se incrementó cuando, partidos y candidatos, aprendieron que era mejor negocio perder.

Las elecciones en México han desarrollado una vigorosa industria, a la cual, no le interesa cambiar la naturaleza de las relaciones comerciales de ese mercado, ni las costumbres, que, a fuerza de utilizarse una y otra vez, se han hecho ley.

3 estratégias quedaron como buenas lecciones de la jornada electoral del domingo pasado, estrategias que por su grado de perversión se convierten en mañas, malas mañas, si se calificarán en algún orden moral, buena mañas si se atienden a sus resultados.

Pulverización
Una estrategia vieja del priismo viejo que, a pesar de todo, le sigue funcionando. El voto antipri, no debe concentrarse en un solo cajón ajeno, es mejor ofrecer al votante, muchos cajones para que distribuyan ese voto que le niegan al PRI.

Incapaz de controlar, convencer o comprar a quienes no están de acuerdo, el PRI, generosamente les ofrece otros espacios para desahogar sus enojos, insatisfacciones o frustraciones. Así ganan todos, los ciudadanos se desquitan y castigan, (según ellos) al PRI, y ejercen su poder para apoyar a otras fuerzas, que solo alcanzan, algunas, a ganar migajas de poder, expresadas en las ganancias plurinominales.

Si usted sumará los votos antipri, vería que son mayoría que en caso de que se hubieran concentrado en un solo partido, habrían cambiado los resultados.

División
Todo partido en el poder, sueña, intenta y a veces logra, apoderarse de otros partidos adversarios, por diferentes caminos. Uno, el más frecuente y exitoso, es financiar alguno de los grupos internos que siempre existen en un partido, para alentarlos, con su ayuda, a obtener el control de ese partido, convirtiéndose en aliados de hecho con el que manda.

En el PAN, ahora eso está más que evidente. Los resultados del domingo han hecho más notoria la división entre los “custodios” de los viejos valores panistas y los nuevos panistas. Los primeros buscan la línea rígida de buscar solos lo que se pueda, los segundos, reconocen en todo tipo de alianzas, las posibilidades, primero de apoderarse totalmente de ese partido, segundo de conseguir puestos y tercero, influir en la mecánica del juego general de una elección

Si no me cree, pregúntele a Margarita Zavala por qué acusa a Ricardo Anaya de alejarse de los buenos principios panistas, que significa, más o menos, que traiciona los viejos ideales del panismo, admitiendo, en algún sentido, alianzas,, entendimientos, o algo parecido, con el eterno rival y con ese juego, hacerle el caldo gordo.

Captación
Impedir que otras fuerzas políticas se unan, así sea, temporalmente. Al comprar una adhesión o alianza circunstancial o efímera, impiden que se consolide un adversario peligroso en la vida real.

A muchos ha asombrado el crecimiento tan rápido que tuvo el PRD en estas elecciones. Enormes flujos de ayuda financiera, lo engordaron para hacer notar que no estaba muerto y que tenía posibilidades de ganar, todo con la intención de que los perredistas aún perredistas, abandonaran su partido y engordaran a MORENA.

Todo esto se planea con mucho cuidado, en algunos casos se pacta o conviene, pero al final se ejecuta y ganan todos, todos los que, de alguna manera entienden que el poder, es una empresa, y que hay que ser socios, así sea minoritarios.

Mañas? pues si, porque nada de esto es nuevo, simplemente se han vuelto a utilizar y ya ve, el ganon ha sido el PRI, el segundo afortunado el PAN, el tercero (garrote) PRD y el gran perdedor MORENA, que a pesar de haber elevado su votación no consiguió en realidad, nada significativo.